El príncipe Andrés, la oveja negra de la familia real británica, volvió a aparecer en público con el resto de los royals. La última vez que se le había visto fue en el funeral de su madre, donde no fue bien recibido y es que su escándalo por las acusaciones de Virginia Giuffre y sus vínculos con el abusador sexual Jeffrey Epstein han enterrado totalmente lo que quedaba de su popularidad.
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Tanto es el afán de la familia real que ahora, en manos del rey Carlos, quieren mantenerlo lo más alejado posible de cualquier miembro activo de La Firma, como se conoce a la monarquía. Según publicó el diario The Sun, su hermano, el rey decidió que el duque de York ya no utilice el palacio de Buckingham como lugar de trabajo.
«Cualquier presencia en el palacio ha terminado oficialmente», aseguró una de las fuentes al diario británico. “El rey lo ha dejado claro. Él no es un trabajador real. Está solo”.
De acuerdo con la decisión del monarca, Andrés ya no podrá usar la dirección del Palacio de Buckingham para ninguna correspondencia y el pequeño personal con el que contaba podría quedar desempleado.
Aparición del príncipe Andrés en Sandringham
A pesar de lo que se conoció sobre el futuro del duque de York, el padre de las princesas Beatriz y Eugenia se unió a ellas y al resto de la familia para el tradicional recorrido a la iglesia de Santa María Magdalena, cerca de Sandringham House, en la mañana de Navidad.
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Andrés, de 62 años, caminó con la familia mientras se dirigían a la iglesia, y habló con el sacerdote después del servicio. Luego se unió para saludar a los miembros del público que estaban reunidos afuera.
Salida de Andrés de la familia real
El príncipe Andrés anunció su decisión de «retirarse de los deberes públicos» en 2019, luego de su entrevista explosiva con la BBC sobre sus vínculos con el financiero caído en desgracia Epstein.
En enero, la reina Isabel despojó a su hijo de sus títulos militares y patrocinios en medio de la demanda de agresión sexual de Virginia Giuffre contra él, en la que Giuffre alegó que fue traficada por Epstein y obligada a tener relaciones sexuales con el duque cuando ella tenía 17 años. Andrés ha negado cualquier delito. En febrero se llegó a un acuerdo extrajudicial por una cantidad no revelada.
