Los duques de Sussex dejaron atrás el glamour de la gala Salute To Freedom en el Intrepid Sea-Air-Space Museum de Nueva York, para tener una visita sorpresa en una base militar.
La gira de Meghan y Harry sigue dando frutos y titulares de prensa luego de que la noche anterior Meghan deslumbrara con un impresionante vestido rojo de la firma Carolina Herrera. Su aparición dio mucho de qué hablar sobre todo en la prensa británica que analizó hasta el lenguaje corporal de la pareja.

El príncipe Harry y Meghan Markle en base militar
El nieto de la reina Isabel y la ex actriz de Hollywood llegaron de sorpresa a la base militar de Joint Base McGuire-Dix-Lakehurst en Nueva Jersey, la visita no fue al azar, sino que está relacionada con la celebración del Día del Recuerdo (Remembrance Day) en Reino Unido y el Día de los Veteranos en Estados Unidos. Allí los duques conversaron sobre la salud mental.
Harry habló sobre su experiencia militar sobre todo tras su paso en Afganistán donde estuvo desplegado en dos ocasiones.
“Mi experiencia en el ejército me convirtió en quien soy hoy, siempre estaré agradecido a las personas con las que pude servir, en cualquier lugar del mundo en el que estemos”, dijo. “Pero en la guerra también ves y experimentas cosas que esperas que nadie más tenga que ver. Eso se queda con nosotros, a veces como una presentación de diapositivas de imágenes”, puntualizó.
Para la cita Meghan no decepcionó y volvió a optar por la mano de uno de los grandes diseñadores de la industria y llevó un diseño de Giorgio Armani. La pieza que eligió es un vestido midi, en color negro ceñido estratégicamente a la cintura con drapeados, escote en V y manga larga. A sus pies llevó unos salones de cuero aterciopelado de la misma firma.
