No hay clima que pueda impedir que la reina Letizia cumpla con sus compromisos oficiales, por eso suele adaptar su guardarropa para lucir, como siempre, deslumbrante sin sucumbir a las bajas temperaturas que se registran el país ibérico.
Esta vez la consorte se desplazó hasta Alicante para presidir el II encuentro de la Red de Centros de atención directa y Servicios Especializados de la Federación Española de Enfermedades Raras. En esta reunión la reina conoció de primera mano los servicios que se ofrecen a las personas.
La Reina preside, en Petrer (Alicante), el II Encuentro Nacional de la Red de Centros de atención directa y Servicios Especializados de la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER).
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— Casa de S.M. el Rey (@CasaReal) January 31, 2023
La reina Letizia en Alicante
Para este evento, la madre de Leonor y Sofía, rescató de su closet prendas favorecedoras y elegantes, perfectas para climas invernales. En concreto, lució vestido con estampado pata de gallo en blanco y negro, firmado por Pedro del Hierro. La prenda la estrenó hace un año en un viaje oficial a Viena.
En esta ocasión combinó el vestido con botas altas de tacón ancho y completó el atuendo con un abrigo de paño en color negro, un básico infaltable en invierno.
Como detalle adicional está la joyería que llevó para el encuentro. La reina decidió lucir unos pendientes que han permanecido en su colección durante 18 años. Los zarcillos fueron un regalo de la Asociación de Joyeros San Eloy de Córdoba y están elaborados con la técnica de filigrana en oro blanco, cuenta con 17 diamantes. En sus manos tampoco faltó el nuevo anillo favorito.
Gran recibimiento
Algo que sin duda no esperaba la reina Letizia es que a su llegada al centro de atención diurna Sense Barreres de Petrer, decenas de personas estuvieran en el lugar para saludarla y aclamarla.
Al grito de «Viva España» o «Guapa», los presentes tuvieron un gesto de cariño que fue correspondido porque antes de ingresar al centro, la reina Letizia se desplazó para saludar a todos los que pudo, incluso tomarse una que otra selfie.
